¿Te consideras una persona supersticiosa? A lo mejor no te consideras supersticioso, sin embargo haces cosas, casi por instinto que son supersticiones: como tocar madera, cruzar los dedos, no pasar por debajo de una escalera o tener algún amuleto de la suerte. Existen muchas supersticiones y según encuestas un 25% de la población se considera a sí misma supersticiosa. Pero, ¿qué es una superstición? La definición de superstición en el diccionario es la siguiente: “una superstición es una creencia contraria a la razón que atribuye una explicación mágica a la generación de los fenómenos, procesos y sus relaciones, sin ningún tipo de prueba científica.”

La parte de que no tenga ningún tipo de prueba científica es la razón por la que muchas personas no creen en las supersticiones, porque nada te asegura que romper un espejo te va a dar 7 años de mala suerte o que tocar madera va a hacer que algo no suceda. 

Muchas de las supersticiones populares que tenemos vienen de hace muchísimos años. También influye mucho que según estudios psicológicos tenemos una tendencia de vincular sucesos recurrentes, aunque no exista en sí una relación de causa y efecto y puede solamente ser casualidad. Por ejemplo, a lo mejor un collar era solamente un collar hasta que te lo pusiste un día y te pasaron puras cosas buenas. Te lo volviste a poner y otra vez solamente pasaron cosas buenas. Entonces, ese collar ya no solamente es un collar, es tu collar de la suerte. Puede pasar lo mismo pero al revés, o sea el collar te dio mala suerte entonces no lo vuelves a usar.  Eso es una superstición. 

Psicológicamente también se ha comprobado que los comportamientos supersticiosos dan una sensación de control, promueven una actitud mental positiva y pueden reducir la ansiedad. 

Muchas de las supersticiones que conocemos son cosas de mala suerte y lo que tienes que hacer para que no te den esa mala suerte. Aquí se ve un poco lo que comentamos de sensación de control, porque de cierta forma tú puedes hacer algo para contrarrestarlo, o sientes que estás haciendo algo.  Te cuento un poco más sobre ellas y de dónde vienen. 

Supersticiones populares y de dónde vienen

• Mala suerte si rompes un espejo: los espejos eran considerados un reflejo del alma. Se creía que cuando te veías en un espejo lo que veías era tu espíritu. Entonces, romper un espejo era como romper tu alma. Se supone que si rompes un espejo son 7 años de mala suerte, el número 7 no es al azar. Esto viene de los romanos. Ellos creían que la vida se renueva cada 7 años, entonces si rompías un espejo ibas a tener mala suerte hasta que empezara tu próximo ciclo de vida. 

• Mala suerte si pasas debajo de una escalera: Para la religión cristiana todo lo que tienen forma de triángulo simboliza la Santísima Trinidad. Al atravesar una escalera estás haciendo algo malo con este símbolo y por eso es de mala suerte, o al menos de ahí viene el origen de esta superstición. 

• Los gatos negros y la mala suerte: esta superstición viene de la Edad Media. Aquí fue cuando empezó la cacería de brujas y se creía que las brujas volaban en escoba y tenían gatos negros. De aquí se empieza el que un gato negro significa mala suerte. 

• Si te barren los pies no te casas: Esta superstición también está relacionada con las brujas. Como ya mencionamos se dice que las brujas viajaban en escobas, entonces si te tocaba un objeto de estos seres te daría mala suerte, como no casarte. 

• Taparse la boca al bostezar: Antes se creía que si dejabas una puerta abierta podría entrar un demonio y lo mismo podía pasar por tu boca. Por eso al bostezar es común que te tapes la boca. 

• Tirar la sal: que se te caiga la sal o tirar la sal es de mala suerte. En la antigüedad la sal se vinculaba con una amistad muy duradera, entonces tirar la sal era darle fin a esa amistad. Hay otra teoría que dice que Judas tiró la sal en la Última Cena y desde ahí se relaciona con mala suerte. 

• Cruzar los dedos: esto se hace por dos razones, para que te de buena suerte y para que puedas no cumplir una promesa. ¿De dónde viene? La Ley de Moisés dictaba que al dar un veredicto tenían que decir “Que Dios se apiade de tu alma”. Muchas personas creían que no tenían la autoridad para decir eso, entonces cruzaba los dedos para imitar la Cruz de Cristo y así fuera Dios el que se encargara.

• Abrir un paraguas en un lugar cerrado: “Los primeros paraguas fueron hechos en el antiguo Egipto con papiro y plumas de pavo real y se diseñaban a semejanza de la diosa Nut. La sombra de un paraguas era, por tanto, sagrada, y se reservaba a la nobleza egipcia. Abrir un paraguas en el interior de un hogar se consideraba en contra del propósito natural y, en consecuencia, un insulto al Dios del Sol, según algunos historiadores.”- Onda Vasca

• Tocar madera: Cuando existe la posibilidad de que algo malo pase, o dices algo que esperas que no pase, tocas madera para atraer buena suerte. El origen de esta superstición viene de las culturas que creían que los árboles eran las casas de seres fantásticos como hadas o duendes. Si tú querías que saliera una de estas criaturas a darte buena suerte tenías que golpear la madera del árbol, como tocar la puerta de su casa. 

• El número 13: viernes o martes 13, piso 13 en los edificios… El número 13 se asocia con la mala suerte y una explicación de esto también viene de la religión. En la Última Cena fueron 13 invitados y se dice que el número 13 era Judas. 

Después de leer todo esto, ¿te consideras una persona supersticiosa?